Localizada no nordeste brasileiro, a Ilha de Itaparica está inserida na Região Metropolitana de Salvador, com pouco menos de 70.000 habitantes.

 

 

Una isla, dos municipios. Itaparica y Vera Cruz representan la herencia de la historia brasileña: iglesias portuguesas en medio de comunidades de origen africano, caracterizadas por aldeas de pescadores de familias de bajos ingresos. Su frontera marítima tiene 35 km de longitud y la mayor parte de su territorio se encuentra en zonas de preservación ambiental y manglares.

Actualmente, el principal medio de acceso desde Salvador es el ferry, que tarda una hora. No hay transporte público y la mayoría de los desplazamientos se realizan en furgonetas privadas. Sólo una pequeña proporción de la población posee un vehículo, por lo que alrededor del 65% se desplaza por medios no motorizados: a pie, en bicicleta o a caballo.

Destacan dos características principales de ocupación: los condominios de verano, que permanecen inactivos la mayor parte del tiempo, y las comunidades tradicionales situadas en la costa y la contra costa. El acceso a las infraestructuras es precario en todo el territorio, y los principales problemas se desarrollan a través de la falta de saneamiento: recogida de aguas residuales y recogida de basuras. Como la mayor parte del litoral está compuesto por condominios privados, la presión inmobiliaria crece hacia zonas irregulares de preservación ambiental.

Pronto se construirá el segundo puente más largo de América Latina para conectar físicamente Salvador y Vera Cruz, y una autopista cortará la isla en dirección norte-sur. Estas grandes inversiones pueden verse como una oportunidad de desarrollo y mejora de la calidad de vida. Y esto, en consecuencia, atrae a un nuevo contingente de población.

El mayor potencial de la isla reside en el puente entre territorios: un puente entre la tierra y el mar, lo hecho por el hombre y lo natural, entre el futuro y el pasado. La isla es el puente entre el desarrollo y la ancestralidad, y el mayor reto es cómo equilibrar los conflictos del crecimiento valorando al mismo tiempo la preservación histórica, cultural y medioambiental.

Para profundizar en este estudio, se ha optado por un recorte territorial que atraviesa la nueva autopista para garantizar la conexión entre la costa y la contracosta y promover el desarrollo y la movilidad en el sentido transversal de acceso al mar, es decir: caminos del mar entre las comunidades Baiacu e Coroa. Con el objetivo de identificar las limitaciones de la isla y explorar su potencial y desarrollar una estrategia de planificación transversal que pueda resolver y al mismo tiempo proteger.

 

ILHA DE ITAPARICA es un proyecto del IAAC, Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña, desarrollado en la Maestría Online en Ciudades en 2021/2022 por los estudiantes: Ana Luiza Ottersbach, y profesorado: Willy Müller & Francisco Villeda & Danielle Nina.