Golfo San Jorge: cuál es tu unidad de medida?

Los paisajes productivos de la cuenca hidrocarburífera del Golfo San Jorge son espacialmente heterotópicos y complejos. Funcionan como capas o layers superpuestos -supra y sub territoriales- que incorporan a la superficialidad que define su condición de “superficiarios”, en su acepción más parasitaria, el mundo de lo subterráneo, donde anida toda la potencia tecnológica y narrativa del enorme campo de fricción que se disputa en superficie: “Por lo general, la heterotopía tiene como regla yuxtaponer en un lugar real varios espacios que normalmente serían, o deberían ser incompatibles.” ( Foucault: 2010 [1966])

¿Cómo se cartografía esta frontera? ¿Cómo dar cuenta de su complejidad, de sus tensiones, de sus relatos? Cómo se mide una extinción? Cómo visionar atisbos futuribles que traccionen una realidad transformativa?  Cómo generar estímulos emancipatorios de bienestar compartido?

Es posible definir un kit de estrategias re-generativas y resiligentes, de fisiología planetaria y parasitismo multiespecie, para dar respuesta a la contaminación ambiental y la rigidización en las relaciones ecosistémicas en los territorios industriales afectados por el extractivismo minero petrolero?

Beyond Petroleoum plantea un horizonte de posibilidad para estos machine’s landscapes, territorios altamente tecnificados y afectados por procesos extractivistas mineros con obsolescencia programada, estableciendo un pacto ecosistémico de intimidad operativa, en el cual podamos co-habitar juntos.

Procesos de re-colonización de la naturaleza y de naturalización del artificio restauran progresivamente la tecno-biodiversidad de estos paisajes productivos industriales “del día después”, promoviendo una mutualización relacional entre la masa antrópica y la biomasa, entre los bits y los átomos como estrategia de remediación de la contaminación residual.

Beyond Petroleoum asume la falta de planificación de Comodoro Rivadavia como una oportunidad para reformular nuevos eco-tecno-patterns de activación y remediación del paisaje existente, impactado por el proceso extractivista de la industria petrolera.

El itinerario propuesto aborda la reconfiguración de los vacíos urbanos atestados de pozos que atomizan el ejido de la ciudad, a partir del impacto de proyectos de activación y procesos de reparación ecosistémica.

Procesos de re-colonización de la naturaleza y de naturalización del artificio restauran progresivamente la tecno-biodiversidad promoviendo una mutualización relacional entre la masa antrópica y la biomasa, entre los bits y los átomos como estrategia de remediación de la contaminación ambiental.

El carácter residual de las denominadas “periferias de proximidad” es saneado en su toxicidad en un lapso de 30 años, mediante mecanismos de participación público – privada y de autogestión comunitaria que inauguran un Nuevo Contrato Social.

Se instala en la agenda pública una política de suelos que regula los embates de la Ley de Minería, generando acuerdos con las empresas operadoras y con una ciudadanía implicada con la proyectación de un futuro sostenible.

La hipótesis desarrollada propone desentrañar mitos, poner en crisis los arquetipos relacionados con la idealización naturalista de la Patagonia confabulando hipersticiones como mecanismos de ficción, generando diagnósticos y también pronósticos que abrevan en las protopías de la remediación ambiental.

En ella conviven, paradójicamente, varias resonancias conceptuales y metodológicas: una recursión poética en torno a los imaginarios instalados; una manipulación abductiva de la realidad para la producción especulativa de futuro; un desplazamiento en las distinciones natural/artificial, supra/infra, bio/tech, polaridades que se diluyen ante el extrañamiento que producen estos paisajes maquínicos; una coexistencia entre especies que genera, ante la contaminación, una responsabilidad expandida y compartida.

La contaminación aparece cuando el sumidero deja de ser capaz de limpiarse a sí mismo. En otras palabras, la contaminación solo es problemática y solo es realmente contaminación cuando satura un cierto umbral de medición.

Es por lo tanto indicio de una relación colonial con la tierra, convertida en una propiedad a parasitar. Ser un parásito y contaminar no es lo mismo, pero ambos evidencian una apropiación como acto de poder y hegemonía, y una subversión de los recursos: comer o ser comido es un recurso eminentemente biológico que anida en todo ser vivo. Desde estas coordenadas, el proyecto propone un saneamiento territorial a partir de una topología de intervenciones fisiológicas relacionales (eco-tecno-patterns), que instalan un pacto post Antropoceno de humanidad aumentada, permutando la condición parasitaria de la contaminación por un mutualismo de hospitalidad entre especies -biológicas, geológicas, ecológicas, tecnológicas, algorítmicas, robóticas- que trastoca los modos tradicionales de colonizar el territorio[3].

Estas taxonomías definen el Espacio Agrario Periurbano, un espacio metabólico de regeneración incremental a partir de las mutaciones continuas de un catálogo de “super especies”, inventariado y representado como un códice darwiniano.

 

Beyond Petroleoum es un proyecto del IAAC, Instituto de Arquitectura Avanzada de Cataluña desarrollado en la Maestría Online en Ciudades en 2021/2022 por la estudiante: Marina Villelabeitia y profesorado: Willy Müller.